En una de sus geniales presentaciones en Cuba, El Diablo de la Salsa, Oscar D’ León, cuando cantaba caminando entre el público, sintió que el cable del micrófono que llevaba en la mano no alcanzaba para seguir compartiendo su música con los compañeros que lo seguían y bailaban a su lado, y en ese momento creó una frase que se hizo popular en Cuba hasta hoy: “Dame cable”. Así ocurre muchas veces, los admiradores y seguidores de algunas personas, tienden a repetir las frases que dicen sus líderes.
Así pasó con el Presidente Hugo Chávez Frías, que un día llamó escuálidos a la gente de la oposición, y hasta la luna llena y más allá, la palabra sigue convertida en el verdadero calificativo que le cuadra a esa gente.
Pero, también hay que decirlo, aunque parezca mentira, un día, mientras miraba caer la tarde, Enrique Capriles Radonski llamó enchufados a los chavistas y la frase quedó gustando y sigue por ahí recorriendo el país en boca de los escuálidos que no están dispuestos a darle cable a nadie. Y esa oportunidad es buena para conectarla con el tema que queremos tocar.
¿Quién inventó el enchufe?
En 1882, en Inglaterra, Thomas Tayler Smith presentó una patente por una “…conexión de circuito eléctrico” para “…permitir que los conductores eléctricos que transportan la corriente a una o más lámparas, o a lo largo de un cable flexible, se traten de manera rápida y segura con la línea o los cables”. Es decir, un enchufe.
Sin embargo, como siempre pasa, hay otra gente que dice que fue en Estados Unidos donde primero se conoció este maravilloso invento. Y fue Harvey Hubbell, quien en 1904 logró patentarlo. En ese momento se le llamó: Enchufe de accesorio separable. Desde ese mismo instante comenzó a comercializarse por todo el mundo y hasta hoy no ha podido crearse un enchufe universal. Por el contrario, hay más de 14 tipos de enchufes en el mundo.
Harvey Hubell fue un empresario estadounidense, y es conocido por sus principales inventos: el enchufe eléctrico estadounidense y el enchufe de luz con cadena de tracción. Un inventor con más de 40 patentes recibidas, la mayoría de ellas para productos eléctricos.
Enchufe macho y enchufe hembra
Es bueno recordar que un enchufe está formado por una clavija y un tomacorriente. La clavija es la que se conecta al toma corriente o enchufe. Esa clavija puede estar formada de varias formas.
Y así como un tornillo necesita de una tuerca para hacer mejor su trabajo, igualmente así ocurre con el enchufe.
El enchufe macho es el que tiene las varillas y se introduce en el enchufe hembra para dar y prolongar la electricidad. Este enchufe está ubicado al extremo de un cable. Y su función es esa, establecer una conexión eléctrica con toda seguridad.
El enchufe hembra es el que está empotrado en la pared, o de manera superficial. Ese enchufe tiene dos entradas, o tres, por donde penetra el enchufe macho para, en conjunto, hacer la conexión y generar electricidad.
Al viajar no olvide llevar su enchufe
Hay viajeros que cada vez que salen de su país de origen, lo primero que meten en su maleta es el enchufe del país en el que van a estar de vacaciones o en viajes de negocios. Porque así, como cada país tiene un nombre, también cada país tiene un tipo de enchufe específico.
En la década de los 50, los británicos decidieron usar el enchufe tipo G. Mientras que en el resto de Europa se usan los tipos C, E y F. También en Perú, Chile y Uruguay se utilizan estos mismos enchufes.
Así nos vamos encontrando con enchufes A y B, que se usan en América del norte y del centro. Enchufes L, que se usan en Italia, Chile y África del Norte. Enchufe N, que se usa en Brasil. Enchufes O, que se utiliza sólo en Tailandia. Enchufe D, que se usa en la India. Enchufe G, en Gran Bretaña. El enchufe H, en Israel. Enchufe I, en Australia y Nueva Zelanda.
El enchufe C es el más usado en el mundo. Se usa en España, África y gran parte de Europa. El enchufe J, en Suiza.
Recuerde que, para viajar bien enchufado por el mundo, lleve dos enchufes, uno de 110 voltios, con láminas planas, y otro de 240 con clavijas cilíndricas.
2 comentarios
Al ver el título y empecé la lectura, me imaginé un final de enchufados, la contaminación política hace sus efectos. jajaja. Saludos profesor
Es cierto, hace poco mi hijo me comentó sobre esa variedad de enchufes y me pareció una locura, imaginen llegar a otro país y tratar de usar tu cargador en algo que será imposible 🙂